PADRE NO HAY MÁS QUE UNO ¡ A DIOS GRACIAS!

100 Post publicados, no os voy a dar el tostón, con eso de parece que fue ayer, cuando me embarque en esta aventura y todo lo demás,  no, después de la última de mi padre, bastante sonada en el barrio, no me he podido resistir tenía que contarlo.

            Mi padre es especial, tiene menos desarrollo que el motor de un triciclo de pedales, me refiero a su cerebro, que sí, que le quiero, que es mi padre, pero no tiene remedio ni quien se lo ponga.

 

            La semana pasada recibo una llamada de mi madre.

-         Hija, tienes alambre del blando.

-         Mama, ¿para qué quieres alambre?

-         Pues nada que se me a atascado la pila y tú padre me la va arreglar.

-         ¡Mira que te lo tengo dicho! Si es que lo tiras todo por el fregadero, incluso el aceite y eso es letal para las tuberías.

-         No me regañes, que ya está echo.

-         Si me hicieras caso, no tendría que regañarte, cabezota.

-         La culpa la tienes tú.

-         ¿Yooooooo?

-         Si, llevas semanas diciendo, se te va a atascar, se te va a atascar y claro al final me has mandado el cenizo.

-         Pero tendrás cara, encima que te avisaba.

-         Tú lo que eres es una bruja.

-         Pues mejor me lo pones para hacerme caso, bonita.

-         ¡Vale lo que tú digas!, pero ¿tienes alambre o no?

-         Ahora te lo lleva mi Lucerín y ya de paso le hecha una mano a papá.

Al cabo de dos horas vuelve mi Lucero de casa de mis padres, que dicho sea de paso viven cruzando la calle.

-         ¿Qué tal, lo habéis arreglado?

-         Me temo que esta vez se ha jorobado a conciencia.

-         ¡No me fastidies!.

-         No hay manera de desatascar, va a tener que llamar al fontanero.

 

Una hora después llega mi hermana a casa.

-         Te traigo ropa, para que la metas en tú lavadora.

-         No te preocupes, como anda la cosa

-         Peor.

-         ¿Peor?

-         Papa a decidido que va a picar azulejos y suelo para llegar a la tubería y cambiarla.

-         ¿Y que ha dicho mama?

-         Tomarse una pastilla de la tensión, sobre todo cuando nos ha dicho muy serio.

o       Hay que romper azulejos y suelo para llegar a la tubería, pero no os preocupéis, no os va a costar dinero, por que tengo tubos y codos de PVC.

-         ¿Perdón?- Dije a duras penas entre carcajadas.

-         ¡Sí! Lo que has oído, tú santo padre cree que con unos coditos de PVC y unos tubos, esta echo el presupuesto, eso después de picar media cocina, por que esa es otra ha decidido que las tuberías van por en medio de la cocina, que ya le ha dicho el vecino de abajo, que van por el muro de al lado, pero el está empeñadito. Como tiene tubos de sobra.

-         Nena y esto ¿no será una de las suyas para reformarle la cocina a mama, sin que ponga el grito en el cielo?

-         Si yo también lo he pensado, pero si le hubieras visto lo serio que se apuesto, a mí casi me da algo de la risa, por que el jodio se lo cree, que es lo peor.

Dos días después, la cocina de mi madre parecía un campo de minas y mi padre había sacado de todo de las tuberías, pero aún así continuaba el atranco, así que decidió, que era algo más general y él iba a arreglarlo a su manera, o sea pico en mano, dirección del garaje.

                        En esto el vecino que lo ve y le dice.

-         ¿Dónde vas con el pico?

-         A picar las tuberías del garaje, para arreglar el atasco.

-         ¿Pero es que no lo has arreglado todavía?

-         Que va no hay manera, sigue atascado, va a ser general.

-         ¿Cómo va a ser general si sólo lo tienes tú?

-         Por eso voy a picar al garaje, para ver que es lo que pasa.

-         ¡No me jodas! Anda sube pa riba y vamos a echarle un vistazo, que a poquito que te dejemos nos dejas el edificio como un solar.

No os digo más que 5 minutitos de reloj fue todo lo que necesito el vecino, que es lo bueno que tiene vivir en un barrio obrero, metió una manguera a presión y ¡Zaas! El atasco se fue por donde hubiera venido.

            Menos mal que la cocina la ha dejado bien, que si no mi madre, se lo carga, en fin que entre esta y la del telefonillo son la diversión del barrio, pero lo del telefonillo, ya os lo cuento en otra ocasión.

Gracias a todos por soportarme durante 100 post.