18 sept 2007

LOS POLVOS DE MI VECINA LA DE CUENCA

En la vida hay momentos, en los que una se deja llevar y la imaginación comienza ha hacer estragos, creo que fue esa la razón por la cual una de mis vecinas y sin embargo amiga, hizo lo que hizo.
Los comienzos con mi amiga la de Cuenca, fueron duros, ella no deseaba venir a esta nuestra comunidad y trajo unas malas pulgas, que pa que te cuento, le sacaba punta a todo y a todos, no dejando títere con cabeza, reconozco que el fin de semana en el que hicimos la mudanza, acojonáramos al personal, y es que como ya conté en otro blog mi Lucero tiene nueve hermanos, siete de ellos morenitos, morenitos y muy escandalosos son capaces de sacar guasa de cualquier cosa, con lo cual ahora entiendo por que todos los vecinos permanecían en sus descansillos mirando con cara de pocos amigos y pensando ¿de donde habra salido esta pandilla de quinquis?.
Mi vecina la de Cuenca, fue un hueso duro de roer pero al final descubrió bondades en mi que a día de hoy todavía estoy buscando y termino encariñándose conmigo, juntas hemos corrido aventuras dignas de ser contadas en este blog. Como aquella en que hizo una investigación exhaustiva a su vecino de descansillo.
Ella se había enfadado meses antes con el y no le hablaba, eso sí le observaba, la verdad es que el vecinito se las traía, le apodamos el Cachas, ya os podéis imaginar porque, musculoso y calvo, que os suena.
Estaba casado y a su chica la utilizaba a modo de pesas, se la subía a la chepa y con ella encima hacia las sentadillas. Era curioso lo de su trabajo, a cada vecino le decía uno diferente, con lo cual nadie sabia a que se dedicaba, ante esta situación mi vecina la de Cuenca decidió llegar al kit de la cuestión.
Comenzó por intentar controlar las entradas y salidas del pájaro en cuestión, como no tenía horario fijo, lo mismo salía a las cuatro de la mañana que a las tres de la tarde, una mañana el salió con una gran bolsa de deporte mientras mi vecina la de Cuenca tendía la ropa y a su paso iba dejando un hilo de polvo blanco, que en cuanto desapareció el Cachas, se apresuró a recoger del suelo y meterlo en un bote, que más tarde trajo a mi casa.
Ella – Mira lo que se le iba cayendo al Cachas esta mañana de una bolsa.
Yo - ¿Y eso que es?
Ella – Creo que droga, tú sabes como comprobarlo.
Yo - ¿YOOOO? Conteste incrédula que lo más fuerte que he tomado es un Gin tonic.
Ella – Pues entonces tu propio, que es un chico de mundo.
Yo – Bueno déjamelo y cuando venga a comer se lo digo.
Cuando mi Lucero llegó a casa y le expuse el problema, el tampoco sabía como desvelar la intriga, así que se lo llevo al mundillo Lucero, que algún viciosillo tiene.
Se encontró con un compañero y se lo mostró.
Mi lucero – Como puedo saber si esto es droga.
Compañero – Fácil, pruébalo.
Mi lucero – Como.
Compañero – No me jodas que no sabes como saber si es pura o no.
Mi lucero – Por que crees que te lo pregunto, lumbreras.
Compañero – Moja el dedo y llégatelo a la boca, como en las pelis.
Mi lucero – Y a que sabe.
Compañero – Joder macho trae paca, que te veo muy verde, como compras esto si no tienes ni idea – iba hablado mientras lo chupaba
Mi lucero – No si no es mío, es de una vecina.
Compañero – Coño tío, me quieres intoxicar.
Mi lucero - ¿Por qué? ¿No es buena?
Compañero – Que buena ni que cojones si esto es desodorante de pies.
Mi lucero le explico a su compañero lo ocurrido y este se estuvo riendo de nosotras hasta varios años después.
Cuando le conté a mi vecina lo ocurrido, le dije que se dedicará a otra cosa que no fuera el espionaje, que para el tema era negada, pero ella se salió con la suya y al final descubrió en la portada del periódico donde trabajaba su marido al vecino en cuestión, intentando que no se le viera la cara, pero nosotras le reconocimos por la calva, es algo así como un policía, lo mismo desactiva bombas, que detiene etarras, esta vez si que es verdad, por que además de la calva en la fotografía, nuestro vecino el Ultra que tiene un cuñao poli lo miró en sus archivos.
Como mi vecino el Ultra vive pared con pared con el Cachas, lo único que le preocupa a partir de entonces es si el Cachas se trabajo a casa.

17 sept 2007

UNA ENTRADA TRIUNFAL

El sábado fue el cumple de mi brujita, pero no lo celebro hasta el miércoles, y es que también los cumples son comunitarios, en esta mi comunidad, vamos que nos juntamos los vecinos que cumplimos en el mismo mes, y matamos varios pájaros de un solo tiro.
De cómo llegue a esta mi comunidad, forma parte también del destino y sobre todo de la suerte, que en algunos momentos a estado a mi lado y en otros en mi contra.
Yo de pequeña era pobre, pero que muy pobre, y cuando me hice mayor seguí siendo podré, ¡caguen la leche! en fin que después de que mi Lucero del Alma me convenciera para casarme, entre el y mi madre, me convencieron para que alquilara una casita muy pequeñita, bueno para que nos vamos a engañar eran dos habitaciones medio derruidas e inhabitables, no tenía luz, ni agua corriente, ni siquiera un baño, no os lo intentéis imaginar hay casitas de esta en la tele en la puerta siempre hay tres o cuatro churumbeles con mocos colgando y la cara negra, pero una vez mas Mi Lucero del alma, mientras yo le decía que ni de coña alquilaba aquella chavola, a mi madre por detrás le decía que se pusiera en contacto con la dueña, entre mi familia y la escuadrilla de la muerte de la familia de mi Lucero, consiguieron hacer de aquel cuchitril una especie de mini apartamento moniiiisimo.
La dueña casi llora cuando vino a ver como había quedado los escasos veinticinco metros, (vamos lo que viene a ser el sueño de los señores que decoran interiores en el Ikea) resulta que esta mujer, me tenía mucho cariño, era amiga de mi madre cuando yo era muy pequeña y como ella no tenía hijos me cuidaba de vez en cuando, mi madre me recordaba como la mujer cada vez que algo se me caía al suelo lo limpiaba con su mandil, el cual no había visto el agua desde que lo comprara y me decía eso de lo que no mata, engorda y que así hacía molleja, imagino que sería por la mierda del mandil.
En fin aunque la casita tenía sus inconvenientes, era una planta baja y a mi los vecinos me conocían desde niña, mezcla explosiva esta pues, se pasaban horas hablándome por la ventana y la otra ventana daba a un patio de un vecino que se dedicaba a criar aves, mi vecina era una urraca negra a la que acostumbre a ponerla música por las mañanas, antes de irme a trabajar y cuando los fines de semana no lo hacía el concierto me lo daba ella, para que le pusiera la dichosa música, aunque debo reconocer algunas cosa practicas, como la que desde el baño, mientras una estaba sentada, se podía ver la televisión, la limpieza apenas nos duraba un par de horas y eso con ventanas y no teníamos vecinos ni arriba, ni abajo, con lo cual podíamos estar hasta tarde con los cuatro o cinco amigos que en ella cabían.
Después de habitar mi pequeña chavolilla durante cuatro años, el barrio empezó a cambiar, la gente que tenía estas casitas las fue vendiendo y empezaron a construir pisos, otros vecinos conseguimos un acuerdo con la E.M.V. en el cual los dueños que dieran sus casas serían indemnizados y sus inquilinos reubicados. Mi casera que como ya he dicho me quería mucho, accedió entregar su casa para que a mi me adjudicaran un piso y eso que el dinero de indemnización era poquísimo.
Después de algunas aventuras, que en mi vida nada es fácil del todo, conseguí empezar la mudanza, pero no podíamos dejar la casa hasta el mismo día de la demolición, con lo cual había que vernos a Mi Lucero y a mi embarazadísima con el colchón a cuestas y las mantas sin quitarnos las legañas, por que ya no teníamos ni luz, ni agua, una friísima mañana de noviembre cruzar la calle en dirección a nuestro nuevo hogar. Y siendo recibidos por una vecina, que venía de una zona más noble que nuestras chavolillas con mirada desafiante ante nuestro aspecto de vagabundos indocumentados.
Y así es como comenzó mi aventura por esta mi comunidad.

16 sept 2007

LA BODA.

    Mi lucero del alma es muy especial, tiene una habilidad increíble para ganarse a la gente y conseguir hacer siempre lo que quiera sin que lo parezca. 
    Fue el Intimo de Irma, quien descubrió que mi Lucero del Alma tenía muy desarrollado el Lado Femenino. 
Yo esto, siempre se lo he atribuido a la influencia de sus hermanas, aunque son nueve hermanos, el siempre a estado muy ligado a las chicas, la mayor lo medio crió junto con su madre, y para su otra hermana era el compañero ideal de viaje, en fin que lo adoraban. 
Imagino que os preguntareis donde quiero ir a parar.
Cuando cumplí los dieciocho años lo tenía muy claro, quería irme a vivir sola, ya lo hacía todos lo fines de semana, pero yo quería más y así se lo comuniqué a mi Lucero del Alma:
- He decidido irme a vivir sola- le dije una preciosa noche de verano muy ilusionada. 
– Sí. 
– Sí, ya tengo trabajo y me apetece mucho salir de casa. 
– Genial y ¿Dónde? 
– Pues en algún piso de alquiler. 
– Vale, pero podré ir a verte. 
– Por supuesto - pensé yo sin saber donde quería ir a parar. 
– Y alguna noche me podré quedar a dormir contigo.  
– Pues claro, también lo hago por eso, para tener intimidad - respondí encantada 
– Pues entonces también te ayudaré a buscar casa, tú sola no vas a poder pagarlo todo. Y ya que vamos a vivir juntos, ¿por qué no nos casamos? Total, es lo mismo, y así tus padres no se llevan un sofoco.
– Bueno, no es lo mismo.
– Sí es lo mismo, si vamos a estar juntos, mejor nos casamos y todos tan felices. Nos hacemos un viajecito y todo. 
– Visto así... Pero sólo me caso cuando terminen la Almudena - Fue lo único que se me ocurrió para retrasar la boda. 
– Entonces pronto, ya casi esta. 
– Si decían que faltaban diez años por lo menos. 
– Sería otra, tú no te preocupes que yo lo arreglo. 
Poco tiempo después me dijo que tenía hora para la boda y que los andamios los quitarían a tiempo, de esto hace diecisiete años, en aquel momento la Almudena no estaba terminada, pero mi Lucero del Alma, hábil como el solo, cuando quiere salirse con la suya y aprovechándose de mi total carencia de conocimiento en iglesias y catedrales, me llevo a San Francisco el Grande, donde estaban restaurando los murales de pintura de las paredes con unos enormes andamios, mostrándome lo avanzadísimas que estaban las obras
En fin, que cuando me enteré, ya estaba hasta ilusionada y me daba una vergüenza atroz reconocer que no era capaz de distinguir una iglesia de otra. Y así es, como termine felizmente casada con mi Lucero del Alma.

12 sept 2007

HAY CASUALIDADES QUE NO TE QUITAS DE ENCIMA.




Yo soy de las que piensa que cada uno de nosotros tiene marcado su destino, a mi que no me digan lo contrario, mi vida al igual que la mucha gente, esta llena de momentos que por simples que parezcan consiguen dar giros de 180º a la vida de uno, y vosotros que ya habéis despertado al monstruito que llevo en mí, os vais a caer con todo el equipo, tengo como para escribir 10 libros, así que blogs, ni os cuento los que me pueden salir.
El momento que mas ha cambiado mi vida fue hace unos veinte años, yo iba con unas amigas a la misma disco todos los fines de semana (por Dios ahora que lo pienso que fidelidad) y un día una de ellas decidió que quería cambiar, todas a regañadientes la seguimos y cuando llegamos a la que le gustaba, no pudimos entrar por que había una redada (¿casualidad o no?), como se nos hacía tarde, ya que solo contábamos con quince años y a la diez y media teníamos que estar en casita (eran otros tiempos) nos metimos en la primera que nos encontramos. Allí en la barra con cara de no haber roto un plato en su vida estaba él, monísimo, alto, rubio (eran mechas, su hermana estaba aprendiendo peluquería y era el único que se ponía en sus manos) y con unos ojitos verdes igualitos a los que pone el gato con botas de la película de Srek. A poco más y nos lo llevamos a casa, el inocentemente le dijo a mi amiga que si le podía pedir la bebida, ya que el camarero no le hacía caso, y yo toda dispuesta le dije
Yo - ¿Qué es lo que quieres?
El – Un vodca con naranja.
Yo – Eso está hecho.
Unos minutos después le ofrecí el vaso que me había puesto el camarero, le dio un sorbo y puso una cara rarísima.
Yo – Pasa algo.
El - ¿Qué es esto?
Yo – Ron con limón. ¿Por qué, no es lo que me habías pedido?
El – No, pero da igual, también me lo bebo.
Y desde ese momento no nos hemos vuelto a separar y ya vamos camino de veintiún años.
Lo mas curioso es que el también estaba allí por casualidad, por que normalmente siempre iba con sus amigos a aquella discoteca, y como había llegado tarde del trabajo pensó que estarían allí, pero sus amigos habían quedado en ir a otra, a sí que el pensaba tomarse su consumición e irse a casa, pero en esas que aparecí yo y se acopló a mí como a una tabla de salvamento. Aunque en realidad fue él, él que resulto ser la mía.

10 sept 2007

La cena

Sí, ya hemos cenado, empezamos muy bien, las croquetitas de la C la tortillita de T las olivas de la D y Etc, vamos que había de todo, hasta prostre.
Lo que nadie se esperaba era el espectáculo, que también hubo, Maria la del Bombo como en sus mejores tiempos se dedico a tocar, pero sin timbales, esta vez le todo a la vecina de la E, nosotros la conocemos por la señora rubia, una mujer de unos setenta y tantos que siempre va muy bien peinada con un cabello dorado envidiable, y es que sus hijas son peluqueras, una de ellas también vive con ella y fue a esta pobre criatura a la que le toco todo su repertorio, la cosa al parecer venía de la noche anterior, y aunque la señora Rubia y familia no cenaban con nosotros (son encantadores pero no tenemos tanta confianza) la pobre muchacha decidió sacar a su perro, como todos los animales tienen sus necesidades pobrecitos, y Manuela como no sabía como llamar la atención se la lió, el panorama era de lo más surrealista, la chica (rubia también) dejo el perro en casa y casi se la come, pero como la cosa venía de atrás los padres decidieron tomar parte en el asunto, había que ver al pobre hombre (unos ochenta como pocos) con su camisa y sus pantalocillos cortos dejando ver la escasa carne de sus piernas y su mujer detras, estupendamente peinada como siempre, soltando por su boca todo aquello que se le ocurria, si hubiera concursado en el un, dos, tres, se hubiera llebado el premio.
Nuestros hombres que ante aquel panorama, temían por la salud del anciano corrían que se las pelaban para evitar llegaran a Manuela ninguno de los tres, esta viendo la que había liado se hizo la sueca y se metió en su casa.
A todo esto la vecina de la B que había hecho de postre chocolate caliente con bizcocho, se paso cerca de 15 minutos sacando y metiendo el chocolate, no fuera a ser que terminará de sombrero en la cabeza de alguno.
Como no podía ser de otra manera al final le encontramos el tono cómico al asunto, que os aseguro que aun que se masticó la tensión, era como las pelis de Berlanga.
A mi esta mujer no se por que pero consigue siempre sacarme de quicio bueno a mi y al resto del vecindario.
Pero no os creais que ahí a quedado la cosa noooooooo, hoy cuando he llegue del trabajo oí unos, era mi vecina llamada la pecosa, que quería cargarsela y mucho nos a costado a la hija de la señora rubia y a mí mandar a casa a Manuela la del bombo. Pero lo mas surrealista del todo ha sido cuando Manuela la del Bombo se ha presentado en casa de mis padres, para contarle a mi madre que la he agarrado para hecharla de mi descansillo, lo mismo la mujer en su mente donde las neuronas se pasan todo el tiempo cantando la Conga de Galisco, a pensado que no me vendrían mal unos azotitos por ser mala. Será acusica la muy pedorra.
Ayer en la reunión la verdas muy divertida a pesar de Manuela, estuvimos recordando unos episodios fantásticos sobre aquí mi comunidad, pero como no quiero cansaros lo dejo para mañana.
Un besote a todas, si es que me habéis encontrado

9 sept 2007

Mi comunidad


Hoy tengo cena comunitaria, si habéis oído bien, una cena de está mi comunidad. Por si no teníamos suficiente con las juntas, lo peor es que hasta son divertidas.

El lugar donde vivo, es el lugar donde se inspiraban los guionistas de “Aquí no hay quien viva”. Aunque ellos hicieron la versión light, no se atrevieron a escribirlo todo, sobre todo por que la audiencia infantil.

Como iba contando, a lo largo del año realizamos varias, tengo vecinas con una gran capacidad de imaginación a la hora de buscar motivos para hacerlas, esta vez ha sido por la vuelta de las vacaciones (yo llevo dos meses, ya aquí) pero tienen esa chispa.

Tampoco quiero llamaros a error, no os imaginéis un vecindario tipo americano, donde la amabilidad y la unidad es lo que prima, no, en mi patio les va la marcha, aquí hay juerga un día si y otro también y no me refiero a la de ambiente festivo, de vez en cuando nos visita la policía y alguna que otra ambulancia para retirar las bajas.

Si estáis intentando imaginároslo, no os molestéis, yo llevo doce años viviendo aquí y todavía no me he hecho a la idea, pero para ir aclarando algo, en esta mi comunidad, como en un buen partido de football, hay fondo norte y fondo sur y hasta Manuela la del bombo, que mete todo el ruido que puede y si te descuidas también te da algún meneo.

Digamos que yo formo parte de un fondo, todavía no se cual, por que en ocasiones formo parte de los ultra y en otras no, dependiendo de la discusión.

No todos los vecinos están invitados a la cena, cosa que a Manuela la del Bombo le molesta muchísimo, (entre otras cosas por que no contamos con ella, por nuestra salud mental y la física también), un año lo hicimos, en las fiestas del barrio, pero después de algunos episodios, algunos juicios y aventuras de lo mas surrealistas, decidimos dejarla descansar en el banquillo. Aunque ella se entera claro. Es lo que tiene hacer la cena en medio del patio, a lo mejor pasaríamos un poco mas inadvertidos, si lo hicieramos en alguna casa.

Aún así espero que esta noche, esté tranquililla o cuando menos cansada lo suficiente, como para tocar el tambor.

Con referencia a el menú, a mi me encargan la alta cocina, eso quiere decir, que soy mas rara que un perro verde, y penosa como cocinera, el resultado no puede ser más nefasto, a veces cuesta hasta distinguir, es ahí donde entran mis dotes creativas, hay que ver como decoro, que bonito lo dejo, no saben lo que comen, pero les entra por los ojos. Hasta que les llega al paladar.

El día de la tortilla comunitaria (cada vecina hace una diferente), debo reconocer que la mía, más que una tortilla de calabacin, parecía una de morcilla, que color más oscurito. Ahora que lo pienso, hacía mucho que no me avisaban de una cena en el patio. Cosa que no me extraña, ni con los huevos de mi madre (sus gallinas) resulto comestible, se me olvido la sal, como la hice de calabacín, este amargaba y para rematar faena, se me quemó, vamos no le faltaba detalle, así que mis vecinos además de majos (mi fondo sobre todo) tienen muy buen estomago.

Hoy he decidido sorprenderles una vez más, con un pastel de espárragos y una tarta fría de atún con tomate, aunque lo que realmente espero es que mi vecina la del C tenga a bien prepararme sus deliciosas croquetas, que me pongo morada, la vecina de la D, pone las olivas y las latas de cerveza, la del B es muy creativa, pero en versión comestible, la de la P lo borda como la de la R y bueno la T a veces también me sorprende, aunque yo hecho muchísimo de menos a la de la F que ya no está entre nosotros y me hacia los mejores jacobinos que he comido en mi vida, esta es una cena comunitaria pequeña solo los mas íntimos (vecinos claro) pero así es mejor creerme.

Bueno en los próximos ya os iré contando como salio la cena y si tocaron o no el Bombo, bueno y si viene la ambulancia que no sea por mí.

JUICIO LEVE DE FALTAS

  VECTOR PORTAL Como ya os conté, Manuela tuvo un brote y, en plan chungo, me dejo claro que no era su vecina favorita y que, en cuanto me d...